INSIDE – OUT
ADRIANA TORRES
Del 11 de junio al 30 de septiembre de 2021
La reflexión sobre el ser humano, sus preocupaciones y sufrimientos, el papel de la mujer en nuestra sociedad, nuestro yo interior, el silencio, la soledad y la epidermis social, son los aspectos que le preocupan, como artista y como mujer, a Adriana Torres, que presenta por vez primera en la ciudad de Málaga una exposición individual bajo el título INSIDE-OUT, y que recoge dos series de trabajos totalmente inéditos integradas por 30 obras entre esculturas, pinturas y dibujos en diferentes soportes como espejos, lienzos y papel, y cuya composición y distribución expositiva enfrenta ambas series en una suerte de dualidad discursiva entorno a nuestro yo superficial, nuestra imagen y lo que queremos proyectar de nosotros al exterior, frente a nuestro mundo interior, ese yo introspectivo incapaz de jugar a la especulación de la imagen que responden a la filosofía de su autora incardinada en el Arte Confesional. En palabras de la artista sobre su serie Mirrors: “Los espejos tratan nuestra imagen externa, los selfies hablan de lo que queremos enseñar a los demás, imágenes forzadas y retocadas, una posverdad sobre nosotros mismos, al tiempo que componen una imagen que nos devuelve nuestro reflejo, quiénes realmente somos, el selfie que en ocasiones solicitamos hacernos con alguien a quien supuestamente admiramos…” El selfie, en efecto, se ha convertido en un elemento nítidamente definidor de la sociedad actual, en lo que podría llamarse su dimensión epidérmica o exterior. Es elemento constante de nuestra vida social y por ello mismo componente estructural que nos define. En palabras del prestigioso filósofo y crítico de arte, Fernando Castro Flórez, autor del texto del Catálogo de la Exposición, “Vivimos atrapados en la compulsión de repetición de nuestra imagen, en un narcisismo que no conduce a la postre a otra cosa que a la insatisfacción. Con enorme lucidez, Adriana Torres se “apropia” de selfies puestos en circulación en Internet para pintarlos sobre espejos que, por supuesto, “incorporarán” al espectador en esa pose superficial. Los marcos antiguos que utiliza esta artista (inspirada según confiesa en los de los espejos de los palacios napolitanos) establecen una fricción temporal (la memoria frente al vértigo de lo actual, el pasado confrontado con una instantaneidad amnésica) pero también introducen una delimitación “lujosa” para invocar un deseo contemplativo. Esta mise en abyme de la “pulsión sélfica” que nos recuerda aquellas obras especulares de Pistoletto, da cuenta de la ansiedad de una belleza cosificada o, en otros términos, de una “modelización” de la subjetividad que puede no ser otra cosa que un “sometimiento” ridículo. No es irrelevante que la única mujer que no se está haciendo un selfie en estos “retratos de cámara” sea la propia Adriana Torres que hace un paródico gesto de victoria con el pincel en la mano, en un guiño velazqueño que nos hace cobrar conciencia de la cualidad heterotópica del arte.”
En palabras de la autora en alusión a la serie Roots of dreams, “se habla de nuestro verdadero yo, de cuando estamos solos, en silencio, de cuando nuestro corazón se expande al darle sitio de reflexión, de calma y de sincera verdad”. En el fondo, las dos dimensiones nos representan. Es lo que somos, ambas constituyen un “espejo” en que se refleja nuestra realidad, superficial y profunda, verdad y posverdad. En sintesis y en palabras de la autora: “la identidad y la verdad”.
Adriana Torres (Sevilla, 1968) es Graduada en Bellas Artes y doctorada por la Universidad de Sevilla. Realiza cursos de Post Grado, en la prestigiosa Central Saint Martins, University of the Arts London.
Ha realizado exposiciones individuales, colectivas y participaciones en ferias en numerosas ciudades españolas, así como en los países Reino Unido, Austria, Holanda, Portugal, Armenia, Corea del Norte, Taiwán, Austria, Paraguay y EEUU, destacando sus exposiciones en el Instituto Cervantes en Londres, y la participación en la Bienal de Maastrich.